Domisfera

La ICANN tiene la última palabra sobre el precio de un dominio, garantiza la estabilidad de Internet o decide si se crean nuevas extensiones y cuáles acepta. Hoy hay aproximadamente 1.500 millones de internautas, apenas un 22% de la población mundial. El potencial es enorme.

La ICANN es una organización sin ánimo de lucro (principios de la ICANN) creada en California hace más de 10 años para reemplazar el vacio dejado por la institución humana, Jon B. Postel. Ha operado bajo el auspicio del Departamento de Comercio de los Estados Unidos. Es decir, el gobierno de los Estados Unidos es la única entidad que ha ejercido algún tipo de control sobre la ICANN.

Viviane Reding (en la foto) es la comisaria para la sociedad de la información de la Unión Europea. El 4 de Mayo ha pronunciado un interesante discurso sobre el gobierno de Internet y el papel de la ICANN (video y pdf)

Según Viviane este poder se ha venido ejerciendo de una manera razonable. Pero también cree que la decisión (a largo plazo) de la administración Clinton para privatizar el sistema de dominios de Internet es el camino a seguir.

No es defendible que un departamento de un único gobierno continue auspiciando a la ICANN, a pesar de la razonable actuación que ha tenido.

Después de los 8 años de Bush, espera que ahora Obama retome el camino de Clinton. El momento de la verdad llegará el 30 de Septiembre de 2009, cuando expiran los acuerdos entre la ICANN y el Gobierno de los Estados Unidos.

La ICANN tiene una posición de un cuasi monopolio global. El debate de ante quién debería ser responsable debería abrirse. La naturaleza global de Internet requiere una gestión global. ¿Quién deberia asegurarse de que la ICANN trabaje para un Internet libre y sin censuras?

Viviane Reading propone el siguiente modelo en el gobierno de Internet, que vería como una evolución del actual:

1) Que la ICANN se privatize completamente y sea una corporación con total transparencia financiera.

2) Todas las personas, empresas, instituciones y organizaciones afectadas por las decisiones de la ICANN deberían tener derecho a solicitar que dichas decisiones puedan ser revisadas por un Tribunal Internacional independiente. Las decisiones de la ICANN afectan a millones de personas por todo el mundo. Los tribunales de California no son el sitio ideal para dirimir conflictos y retos legales que se pueden originar en cualquiera de los cinco continentes.

3) Mientras que la gestión del día a día puede seguir siendo llevada por la ICANN, debe existir un foro multilateral donde gobiernos de todo el mundo puedan debatir temas relacionados con las políticas de Intenet.

En la mayoría de los casos, la experiencia de la ICANN y las fuerzas vivas del mercado así como las leyes y principios internacionales serían suficientes, pero habrá casos donde la coordinación entre los diferentes gobiernos mundiales sea imprescindible, por ejemplo en los referentes a la estabilidad y seguridad.

Algunos creen que Naciones Unidas sería un buen candidato para esta tarea, sin embargo Viviane cree que sería más eficiente un G-12 para el Gobierno de Internet. Consitiría en un grupo de representantes gubernamentales que se reunirían al menos dos veces al año para hacer las recomendaciones que estimen oportunas a la ICANN.

El G-12 estaría compuesto de dos representantes de Norteamérica, Sudamérica, Europa, África y tres de Asia y Australia. También estaría el Presidente de la ICANN, como miembro sin derecho a voto. Organismos internacionales con competencias en este área podrían estar como observadores.

Obama tendrá la palabra el próximo 30 de Septiembre.